(S)i tan solo pudiera explicar por escrito lo que siento todos los días cuando abro los ojos, Síclo no solo vino a cambiar al 100% el concepto de lo que un trabajo significaba en mi cabeza, Síclo hizo que todos los días tengas ganas de hacerlo. Me enseño a motivar y cuidar a todos los que me rodean, me hizo darme cuenta que entregando una sonrisa puedes cambiarle el día a una persona y puedes formar una parte esencial  de su vida.

(Í)ronico toda mi vida hice todo tipo de ejercicio pero mi primera clase en una bici estática fue aquí, donde en 45 minutos me di cuenta que no solo quieres hacer ejercicio, quieres sentir la adrenalina que Síclo le da a tu día, que puedes tener un día malo y aquí le vas a dar a poder la vuelta. Síclo cambio mi percepción de un workout, me regaló la fuerza para poder rodar hasta 5 clases en un día con un sonrisa de oreja a oreja.

(C)onocí a lo que hoy llamo familia, no equipo de trabajo, me ha enseñado a entender a los demás y a ser su apoyo. Entendí que para poder crecer una comunidad necesitas miles de personalidades diferentes sabiendo que esa diversidad te hará llegar más lejos y lograrás estar el corazón de todos.

(L)o mejor que me pudo haber pasado fue decidir dejar mi propia banquetera para dedicarle todo mi esfuerzo y cariño a lo que hoy ha llenado mi corazón al 100%.

(O)rganización es una de las cualidades mas grandes que Síclo me ha dado en estos 10 años. Me enseñó a crear hábitos y rutinas saludables con las que ahora tengo un estilo de vida que adquirí sin darme cuenta y con pocos esfuerzos.

Hoy me gustaría saber en cuantos celulares estoy guardada como “Tanya Síclo” porqué hoy les puedo decir que se convirtió en mi segundo nombre.

Gracias Síclo.